Solo
con un choque eléctrico de alta energía sirve para restaurar el ritmo normal
del corazón, ya que el nuevo método supone un ahorro energético de más del 80%
en comparación con la técnica estándar de la desfibrilación cardiaca
El
estudio fue publicado en la revista Nature donde se expone que para controlar
la turbulencia eléctrica en el corazón se utilizaban impulsos eléctricos de
alta energía, que pueden provocar efectos secundarios graves que incluyen daño
en los tejidos y dolor traumático, pero ahora con el nuevo estudio se plantea
un enfoque totalmente diferente.
La
nueva técnica es conocida como “estimulación de baja energía contra la
fibrilación” (LEAP, por sus siglas en inglés). Los resultados muestran que
reduce la energía en un 84% en comparación con la desfibrilación estándar.
Este
método abre el camino para la terminación indolora y no perjudicial de las
arritmias cardiacas. Los autores estiman que su método funciona mediante la
estimulación de las heterogeneidades naturales, como los vasos sanguíneos y el
tejido graso, para redistribuir la corriente alrededor del corazón y restaurar
el ritmo sinusal normal.
La
fibrilación es uno de los trastornos del ritmo cardíaco en la que una de las
cámaras del corazón desarrolla múltiples circuitos de reentrada, y hace que los
impulsos se vuelvan caóticos y las contracciones se vuelvan arrítmicas. La
fibrilación puede afectar a los atrios fibrilación atrial o a los ventrículos fibrilación
ventricular.