El ver fumar a otras personas, se ha vuelto una tentación y ahora los científicos se han dado a la tarea de averiguar que es lo que ocurre con el cerebro durante este tipo de antojos.
Para la investigación participaron 17 fumadores y 17 no fumadores, a los que se les mostró fragmentos de una película (Matchstick Men), en la cual los personajes fuman a lo largo de varias escenas.
Se observo que la actividad cerebral por medio de resonancias magnéticas funcionales (FMRI) mostraba una mayor respuesta a la actividad de fumar en la pantalla.
Un estudio publicado en el Diario de Neurociencia muestra que ver a la gente fumar desencadena la misma actividad cerebral de participar en la misma acción, el siguiente paso es intentar ligar los hallazgos para descubrir si ver películas que muestran a gente fumando realmente aumenta la frecuencia o deseo de fuma.
Este estudio es especialmente significativo para las personas que han dejado de fumar o quieren hacerlo, pues podrían caer en este circulo vicioso una vez más.