Powered By Blogger

jueves, 2 de diciembre de 2010

Decálogo para la dermatitis

La Asociación de Familiares y Pacientes de Dermatitis Atópica (ADEA) y cinco expertos internacionales han realizado el primer decálogo europeo de consejos sobre dermatitis atópica (DA) presentada principalmente en niños.

No te rasques: Hay que evitar el rascado ya que se entra en un círculo vicioso”.

Quita la etiqueta: A veces quitar las etiquetas es suficiente para evitar una nueva lesión”.

Escribe un diario: Puede resultar útil escribir en un diario cuándo para saber dónde aparecen los brotes para intentar identificar los desencadenantes de la aparición.

Cuéntaselo al profe: Resulta también muy importante informar a los profesores, porque, a veces, el niño no rinde lo suficiente debido a los trastornos del sueño asociados a la patología.

Tratamiento adecuado: Hidratación, aunque la dermatitis, por el momento, es una enfermedad que no tiene cura.

No olvides las estaciones del año: Los cambios bruscos de temperatura también pueden producir daño en la dermis. En invierno, es importante que su cuarto no esté muy caliente. En verano, asegúrate que tu hijo no se quema con el sol y que las cremas con factor solar que utilizas son adecuadas para pieles sensibles.

Hidratar, hidratar e hidratar: desde cremas hasta geles y pomadas. Es conveniente elegir hidratantes sin fragancia.

Atención a la comida: Leche, huevos, cítricos, chocolate, cacahuetes y algunos colorantes son los alimentos más problemáticos.

La hora del baño: No bañes a tu hijo por más de 20 minutos.

Conciencia a tu hijo: Según el decálogo europeo, a medida que se haga mayor, es importante que el niño empiece a tomar el control en el manejo de la enfermedad.

La dermatitis afecta a entre el 5% y el 10% de la población y su incidencia es mayor en los niños. “La mayor tasa de prevalencia la encontramos en los niños (20%), desde su nacimiento hasta los 10 o 12 años, aunque después desaparece en un 80% de los casos”. La dermatitis es la enfermedad cutánea más frecuente en los niños y se caracteriza por una piel seca, la aparición de lesiones tipo eccema y un intenso picor. “Suele aparecer en la cara, emigra a las flexuras (codo, rodilla), pero afecta a todo el organismo”.